74. El Indulgente que acepta el arrepentimiento (At-Tawwāb)

أَلَمۡ يَعۡلَمُوٓاْ أَنَّ ٱللَّهَ هُوَ يَقۡبَلُ ٱلتَّوۡبَةَ عَنۡ عِبَادِهِۦ وَيَأۡخُذُ ٱلصَّدَقَٰتِ وَأَنَّ ٱللَّهَ هُوَ ٱلتَّوَّابُ ٱلرَّحِيمُ
”¿No saben que Al-lah es el que acepta el arrepentimiento de Sus siervos y reconoce las limosnas, y que Al’lah es el Sumo Remisorio con compasión, y es Misericordioso?” [1]
Según el léxico Aqrab al-Mawarid, تَابَ إِلَی اللهِ مِنْ ذَنْبِهِ (tāba ilallāhi min dhanbihi) significa aquel que se ha arrepentido de sus pecados volviéndose hacia Dios Altísimo. Además, التَّوْبَة (at-taubah) significa tener remordimientos en el corazón y buscar el perdón. Según el léxico árabe al-Munjid, التَّوَّاب (at-Tawwāb) es uno de los atributos de Dios Altísimo y significa el Que Vuelve a menudo con compasión.
Hazrat Abdul’lah (ra) bin Mas’ud relata que el Santo Profeta (sa) les enseñó la siguiente oración:
”Oh Al’lah, infunde amor en nuestros corazones, y establece la paz entre nosotros, guíanos por el camino de la paz y la tranquilidad, sácanos de toda clase de oscuridad hacia la luz, sálvanos de los males, tanto manifiestos como ocultos, y bendice nuestros oídos, nuestros ojos, nuestros corazones, nuestros cónyuges, nuestros hijos, y vuelve a nosotros con compasión. Ciertamente Tú eres el que vuelve [con compasión], el Siempre Misericordioso. Y haznos agradecidos por Tus bendiciones y permítenos ofrecer alabanzas por Tus bondades y concédelas Tu aceptación y perfecciónalas para nosotros”. [2]
Los Atributos Eternos y Perpetuos de Dios
Al explicar cómo Dios Altísimo acepta el arrepentimiento de Sus siervos, el Mesías Prometido (as) declara:
”Así como el tropiezo y el pecado son características manifestadas por almas defectuosas, correspondientemente, existen los atributos eternos y perpetuos de Dios que son el perdón y la misericordia. Él es inherentemente Perdonador y Misericordioso. Su perdón no es casual ni fortuito, sino que es Su atributo eterno que ama y que desea ejercer sobre las personas que lo merecen. Siempre que una persona se vuelve a Dios con remordimiento y arrepentimiento en el momento de tropezar y pecar, se hace merecedora, a los ojos de Dios, de que Él se vuelva hacia ella con misericordia y perdón. El hecho de que Dios se vuelva hacia una persona arrepentida no se limita a una o dos ocasiones, sino que es un atributo eterno de Dios Altísimo. Siempre que un siervo arrepentido se vuelve hacia Dios, este atributo se manifiesta definitivamente hacia él. No forma parte de las leyes divinas de la naturaleza que aquellos que son propensos a tropezar no tropiecen, o que la naturaleza de aquellos que son esclavos de sus rasgos bestiales o agresivos cambie. Más bien, Su ley -que, desde la eternidad, ha estado en funcionamiento- es que las personas imperfectas que cometen pecados debido a sus deficiencias personales, deben encontrar el perdón a través del arrepentimiento y el istighfar.”[3]
Notas de pie de página
1.Sagrado Corán, 9:104.
2.Sunan Abi Dawud, capítulo Tafri’ abwab ar-Ruku’ wa as-Sujud, capítulo at-Tashahhud, hadiz nº 969.
3.Hazrat Mirza Ghulam Ahmadas, Barahin-e-Ahmadiyya – Parte III (Tilford, Surrey: Islam International Publications Ltd., 2018) 87-88.2. Sagrado Corán, 21:105.