6. El Otorgador de Seguridad (Al-Mu’min)

هُوَ اللّٰهُ الَّذِي لَا إِلٰهَ إِلَّا هُوَ الْمَلِكُ الْقُدُّوسُ السَّلَامُ الْمُؤْمِنُ الْمُهَيْمِنُ الْعَزِيزُ الْجَبَّارُ الْمُتَكَبِّرُ سُبْحَانَ اللّٰهِ عَمَّا يُشْرِكُونَ
Él es Dios, y no hay ningún otro dios además de Él, el Soberano, el Santo, la Fuente de Paz, el Otorgador de Seguridad, el Protector, el Poderoso, el Subyugador, el Exaltado. Santo es Dios, muy por encima de lo que ellos asocian con Él.[i]
El atributo de Al-Mu’min (الْمُؤْمِنُ) se deriva de la palabra árabe اَلْاَمْنُ, que significa “Aquel que otorga paz y seguridad” y es el antónimo de “miedo”. Según el léxico árabe Lisān al-‘Arab, otro significado de Al-Mu’min es Al-Musaddiq (المُصَدِّقُ), que significa “El Ser que cumple las promesas que ha hecho a Su creación”.[ii] En referencia a este atributo, el Santo Profeta (sa) dijo:
عَنْ فَضَالَۃَ بْنِ عُبَیْدٍ، عَنِ النَّبِیِّ ﷺ اَنَّہُ قَالَ: اَلْعَبْدُ آمِنٌ مِنْ عَذَابِ اللّٰہِ عَزَّ وَ جَلَّ مَا اسْتَغْفَرَ اللّٰہَ عَزَّ وَ جَلَّ۔
Hazrat Faddalah bin Ubaid (ra) relata que el Santo Profeta (sa) declaró: ‘Uno permanecerá protegido del castigo de Dios Altísimo mientras busque constantemente el perdón de Dios.’[iii]
Al-Mu’min – Una Ciudadela Eterna de Paz
“¡Oh Europa! No estás a salvo. Y ¡oh Asia! Tampoco estás segura. Y ¡oh habitantes de las islas! Ningún ‘dios’ artificial acudirá en vuestra ayuda. Veo ciudades cayendo y casas en ruinas. Ese Único Dios Verdadero permaneció en silencio por mucho tiempo. Se cometieron abominaciones ante Sus ojos, y aun así, permaneció en silencio. Pero ahora revelará Su rostro de una manera sobrecogedora. Que escuche aquel que tenga oídos que la Hora no está lejos. Me esforcé por llevar a todos bajo la protección de Dios, pero los decretos predestinados debían cumplirse. Lo digo con verdad, que el turno de este país también está cerca. La época de Noé aparecerá ante vuestros ojos, y presenciaréis con vuestros propios ojos el incidente de la tierra de Lot. Pero Dios es lento para mostrar Su ira. Arrepentíos para que se os muestre misericordia. El que abandona a Dios es un gusano, no un hombre; y el que no Le teme está muerto, no vivo.’[iv]
Notas:
[i] El Sagrado Corán, 59:24[ii] Lisān al-‘Arab[iii] Musnad Ahmad bin Hanbal, Hadiz no. 24453[iv] Hazrat Mirza Ghulam Ahmad (as), La Filosofía de la Revelación Divina, Ruhani Khazain Vol. 10, p. 373