Salat-ul-jauf (la oración en situaciones peligrosas)
Se permite abreviar la oración ante el riesgo de una amenaza a muerte, por ejemplo, la guerra. El acto de abreviar la oración, o Qasar, se puede aplicar en once casos diferentes, mencionados en el Santo Corán y en las Tradiciones. En resumen, cuando estalla el combate en el campo de batalla, o se prevee un ataque sorpresa por parte del enemigo, o el ejército se ve forzado a tomar posición en las trincheras, las oraciones se acortan debido a la crítica situación. Si la situación lo permite, se ofrecerán dos Rakats, de lo contrario, bastará con uno solo. En el supuesto de que la observancia de la oración en congregación implicara un gran riesgo se podrá rezar individualmente, mas si la situación tampoco lo permitiera, estaría permitido rezar en movimiento, caminando o sobre alguna montura, sin importar la dirección. De existir aún mayor peligro, está permitido orar mediante ademanes, recitando partes de los versículos prescritos. En tales condiciones, también está permitido combinar varias oraciones al mismo tiempo. (Sahih Bujari, Kitabul-Maghazi, Bab Ghazwah Jandaq, Sahih Muslim, Kitabus Salat Bab Salatul Jauf)