La oración durante el eclipse solar o lunar
El eclipse solar se llama Kasuf y el lunar, Jasuf. Este fenómeno de los cuerpos celestes recuerda al justo que, al igual como aparentemente la luz del sol y la luna desaparece en gran medida durante los eclipses, de la misma forma, diferentes tipos de enfermedades espirituales debilitan la luz espiritual que ilumina el corazón del creyente y sólo la merced de Dios puede protegerle de tal eclipse espiritual. Por ello, en el momento de ocurrir eclipses solares o lunares se prescribe una oración de dos Rakats, para recordar a los creyentes que deben de implorar las bendiciones y mercedes de Dios si desean alcanzar la cima espiritual.
Los habitantes de la localidad o ciudad donde ocurre el eclipse deben ofrecer dos Rakats en congregación, bien sea en una mezquita o en un espacio abierto. En esta oración se debe recitar en voz alta el Sura Fatiha y otros largos pasajes del Santo Corán. Se han de efectuar dos Rakus en cada Rakat. Tras la recitación de algunos versículos del Santo Corán el Imam efectúa el primer Raku. Después adopta de nuevo la posición del Qiyam, recitando otros versículos del Corán, y se inclina por segunda vez en la posición de Raku. Según algunas tradiciones, el Santo Profeta (p.b.D.) efectuaba hasta tres Rakus en cada Rakat. Seguidamente, el Imam debe adoptar la posición de Salldah. Deben ofrecerse intensas súplicas tanto en la postura de Raku como la de Salldah. Al final de la oración el Imam debe pronunciar un sermón exhortando a la gente a invocar el perdón a Dios Todopoderoso y exponiendo los medios para la reforma de la sociedad.