¿Por qué no hay un profeta que sea mujer en la historia de las religiones?
Es cierto, que no ha habido profetas que hayan sido mujeres en la historia de las religiones.
Sin embargo, las mujeres han sido las madres de los profetas y han jugado un papel decisivo a la hora de criarles y de encaminarles en la tarea de ser un modelo para la sociedad, en especial en su integridad y su honestidad.
Fueron las madres quienes les enseñaron todas las habilidades en la vida, basadas en las enseñanzas religiosas de su tiempo. ¿Por qué Dios no ha escogido a mujeres que sean profetas? Solo Dios sabe la respuesta.
Podemos apreciar el elevado rango que Dios ha otorgado a las madres.
Si uno analiza la vida de los profetas, está claro que las responsabilidades de llevar el mensaje, ser el líder de los creyentes, estar al frente en los momentos difíciles o en los momentos de oposición, u otros asuntos similares, supondrían un esfuerzo físico muy duro si todas estas fueran realizadas por una mujer. Especialmente cuando ellas tienen la responsabilidad de la crianza de los hijos.
Es interesante mencionar que el conocimiento legado por el profeta Muhammad (sa) fue trasmitido en su mayoría a través de mujeres: sus esposas, ya que eran las observadoras más cercanas de su ejemplar carácter y de su vida profética.