Atributos de Al’lah: El Protector (Al-Muhaymin)
En el nombre de Al-lah, el Clemente, el Misericordioso
No hay digno de ser adorado excepto Al'lah, Muhammad es el Mensajero de Al'lah
Musulmanes que creen en el Mesías,
Hazrat Mirza Ghulam Ahmad Qadiani (as)

Atributos de Al’lah: El Protector (Al-Muhaymin)

هُوَ اللّٰهُ الَّذِي لَا إِلٰهَ إِلَّا هُوَ الْمَلِكُ الْقُدُّوسُ السَّلَامُ الْمُؤْمِنُ الْمُهَيْمِنُ الْعَزِيزُ الْجَبَّارُ الْمُتَكَبِّرُ سُبْحَانَ اللّٰهِ عَمَّا يُشْرِكُونَ

Él es Dios, y no hay ningún otro dios además de Él, el Soberano, el Santo, la Fuente de Paz, el Otorgador de Seguridad, el Protector, el Poderoso, el Subyugador, el Exaltado. Santo es Dios, muy por encima de lo que ellos asocian con Él.[i]

El atributo Al-Muhaymin (الْمُهَيْمِنُ) es uno de los atributos de Dios Altísimo y significa “El Ser que otorga paz y seguridad” así como “El Guardián”. Se dice que Dios Altísimo supervisa las acciones de Su creación y provee para ellos. Hazrat Abdullah bin Umar (ra) relata que vio al Santo Profeta (sa) de pie en el púlpito, narrando un Hadiz-e-Qudsi, en el cual dijo:

“En el Día del Juicio, Dios Altísimo rodeará los siete cielos y la tierra así (el narrador afirma que el Santo Profeta (sa) representó esto apretando firmemente su puño). Luego, Dios Altísimo proclamará: ‘Yo soy Al’lah; Yo soy el Compasivo; Yo soy el Maestro; Yo soy el Santo; Yo soy la Fuente de Paz; Yo soy el Protector, el Poderoso, el Subyugador, el Exaltado. Fui Yo quien creó la Tierra de la nada y Soy Yo quien la devolverá a su estado original. ¿Dónde están los reyes y los líderes de la tierra?’” [iii]

Al-Muhaymin – El Gobierno de Dios

وَالَّذِينَ هُمْ لِأَمَانَاتِهِمْ وَعَهْدِهِمْ رَاعُونَ

Significado: “Los creyentes son aquellos que son vigilantes con respecto a sus encomiendas y pactos.” Esto quiere decir que, al cumplir con las encomiendas y cumplir los pactos, no escatiman esfuerzo en ejercer rectitud y vigilancia. Esto indica que el hombre y todas sus facultades –la visión de sus ojos, la audición de sus oídos, el habla de su lengua y la fuerza de sus manos y pies– son todas encomiendas que Dios Altísimo le ha confiado, y Él puede tomar Sus encomiendas de vuelta cuando lo desee.

Ser vigilante de estas encomiendas significa dedicar el ser y todas sus facultades, y el cuerpo y todos sus órganos, al servicio de Dios Altísimo, observando todos los requisitos más sutiles de la rectitud, como si todas estas cosas no le pertenecieran a uno mismo, sino a Dios; y que el movimiento y operación de todas estas facultades y órganos no estén dirigidos por su propio deseo, sino por la voluntad de Dios. Nada de su propia voluntad debería permanecer; más bien, la voluntad de Dios debería actuar a través de ellos. Su ser debería estar en manos de Dios Altísimo como un cadáver está en manos del vivo. Debería despojarse de su propia voluntad y establecer el control completo de Dios Altísimo sobre su ser, tanto que por Él vea, y por Él oiga, y por Él hable, y por Él se mueva o detenga. Las impurezas más diminutas del ego, que no pueden observarse ni siquiera con un microscopio, deberían eliminarse, dejando solo el espíritu.[iv]

Notas:

[i] El Sagrado Corán, 59:24

[ii] Hadiz-e-Qudsi es una declaración del Santo Profeta (sa) en la que atribuye una palabra o acto a Dios Altísimo, diciendo que Dios le había ordenado así. Tal declaración es diferente de la revelación coránica.

[iii] Tārīkh Baghdād, Vol. 5, p. 355

[iv] Hazrat Mirza Ghulam Ahmad (as), Barāhīn-e-Ahmadiyya Vol. 5, Ruhani Khazain Vol. 21, pp. 239-241

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