Carta al Primer Ministro de Israel
En el nombre de Al-lah, el Clemente, el Misericordioso
No hay digno de ser adorado excepto Al'lah, Muhammad es el Mensajero de Al'lah
Musulmanes que creen en el Mesías,
Hazrat Mirza Ghulam Ahmad Qadiani (as)

Carta de Hazrat Mirza Masrur Ahmad, líder supremo de la Comunidad musulmana Ahmadía, dirigida al primer ministro de Irael, Benjamín Netanyahu.

En el nombre de Al-lah el Clemente el Misericordioso

Estimado Primer Ministro,

Recientemente he enviado una carta a su Excelencia, el presidente de Israel, Shimon Peres sobre el delicado estado de los asuntos del mundo actual. En vista del cambio apresurado de las circunstancias, pensé que era esencial enviarle este mensaje a usted también, dado que usted es el Jefe del Gobierno de su país.

La historia de su nación está estrechamente relacionada con los términos profetázgo y revelación divina. De hecho, los profetas de los Hijos de Israel hicieron claras profecías sobre el futuro de su nación. A consecuencia de la desobediencia de las enseñanzas de los profetas y la negligencia con esas profecías, los Hijos de Israel pasaron por dificultades y sufrieron tormentos. Si los líderes de su nación hubiesen obedecido a sus profetas, se hubieran salvado de muchas desgracias y adversidades. Así pues, es su cometido, quizás incluso más que de otros, el prestar atención a las profecías e instrucciones de los profetas.

Me dirijo a usted como Jalifa del Mesías e Imam Mahdi (la paz sea con él) que fue enviado como servidor del Santo Profeta Muhammadsaw quien, a su vez, fue enviado como salvador para toda la humanidad; al igual que Moisés (la paz sea con él) fue enviado a los Hijos de Israel. (Deuteronomio, 18:18). Por ello, es mi deber recordarle el mensaje de Dios. Deseo que usted se encuentre entre aquellos que escuchen la llamada de Dios y encuentren con éxito el camino recto; el que dictamina Dios Todopoderoso, el Señor de los cielos y de la tierra.

De acuerdo con las actuales noticias usted está planeando atacar Irán, a pesar de tener ante usted la perspectiva y horribles consecuencias de una Guerra Mundial. En la última Guerra Mundial, murieron millones de personas y también fueron segadas las vidas de cientos de miles de judíos.

Como Primer Ministro, es su obligación proteger la vida de su nación. La situación actual del mundo apunta a una nueva Guerra Mundial que no consistirá en una lucha únicamente entre dos países, puesto que se formarán bloques en todo el mundo. El estallido de una Guerra Mundial es una amenaza seria que afectará a todos; tanto musulmanes como a cristianos y judíos. Si una guerra de estas magnitudes llegara a estallar, daría lugar a una cadena de destrucción humana. El efecto de tal catástrofe alcanzará a generaciones futuras, que nacerán inválidos o con defectos, y ello porque, sin duda alguna, tal guerra implicará el uso de armas atómicas.

Así pues, le pido que en lugar de llevar al mundo hacia esta Guerra Mundial, haga los mayores esfuerzos para salvarla de tal catástrofe. En lugar de solucionar los problemas mediante la fuerza, debería resolverlos mediante el diálogo, para que podamos proporcionar a nuestras generaciones futuras un mejor porvenir en lugar de “regalarles” una vida de invalidez y defectos.

Voy a intentar explicar mis observaciones mediante los siguientes pasajes de las enseñanzas de su religión. El primer extracto es del Zabur:

“No te irrites a causa de los impíos ni envidies a los que cometen injusticias; porque pronto se marchitan, como hierbas; pronto se secan, como el verdor del pasto. Confía en el Señor y haz el bien; establécete en la tierra y mantente fiel. Deléitate en el Señor, y él te concederá los deseos de tu corazón. Encomienda al Señor tu camino; confía en él, y él actuará. Hará que tu justicia resplandezca como el alba; tu justa causa, como el sol de mediodía. Guarda silencio ante el Señor, y espera en él con paciencia; no te irrites ante el éxito de otros, de los que maquinan planes malvados. Refrena tu enojo, abandona la ira; no te irrites, pues esto conduce al mal. Porque los impíos serán exterminados, pero los que esperan en el Señor heredarán la tierra. Dentro de poco los malvados dejarán de existir; por más que los busques, no los encontrarás. Pero los desposeídos heredarán la tierra y disfrutarán de gran bienestar.” (Zabur, 37:1-11)

De igual manera, en la Tora encontramos:

No tendrás en tu bolsa pesas diferentes, una grande y una pequeña. No tendrás en tu casa medidas diferentes, una grande y una pequeña. Tendrás peso completo y justo; tendrás medida completa y justa, para que se prolonguen tus días en la tierra que el Señor tu Dios te da. Porque todo el que hace estas cosas, todo el que comete injusticia, es abominación para el Señor tu Dios. (Deuteronomio, 25:13-16).

Por ello, los líderes mundiales, y en particular usted, deberían terminar con el concepto de gobernar por la fuerza e intentar abstenerse de oprimir al débil. En su lugar, deben ser firmes en la difusión y promoción de la justicia y la paz. Con ello usted también se sentirá en paz; ganará fuerza, y será establecida la paz en el mundo.

Es mi plegaria que usted y otros líderes mundiales entiendan mi mensaje, reconozcan su responsabilidad, y cumplan con sus compromisos.

Sinceramente suyo

Mirza Masrur Ahmad

Jalifatul Masih V

Jefe Supremo de la

Comunidad Ahmadía del Islam

Imagen: cortesía de Asim BharwaniLicencia Creative Commons

Share via