La profecía sobre el Reformador Prometido
En el nombre de Al-lah, el Clemente, el Misericordioso
No hay digno de ser adorado excepto Al'lah, Muhammad es el Mensajero de Al'lah
Musulmanes que creen en el Mesías,
Hazrat Mirza Ghulam Ahmad Qadiani (as)

La profecía sobre el Reformador Prometido

Jalifa de la Comunidad Musulmana Ahmadía

A continuación se presenta un extenso resumen del discurso pronunciado por Su Santidad, Hazrat Jalifatul Masih V.

Después de recitar el Tashahhud, Ta’uz, Tasmia y Surah Fatihah, Hazrat Ameer-ul-Mumineen (aba) dijo:

Como ya sabemos, el 20 de febrero es conocido en la Comunidad (Comunidad Ahmadía) por su relación con la profecía de Musleh Maud (el Reformador Prometido). Se trata de una gloriosa profecía en la cual el Mesías Prometido (as) recibió la noticia del nacimiento de un gran hijo que poseería numerosas cualidades. [Entre otras cosas] según la profecía, el Reformador Prometido viviría una larga vida y la comunidad que estableció el Mesías Prometido [la Yama’at (Ahmadía)] presenciaría un extraordinario progreso durante la época de Al-Musleh-e-Maud [el Reformador Prometido]. La historia de la Comunidad Musulmana Ahmadía testifica que todos los aspectos de esta profecía se cumplieron hasta el más mínimo detalle durante los 52 años de duración del Jalifato de Hazrat Mirza Bashir-Ud-Din Mahmud Ahmad, Al-Musleh-e-Maud (el Reformador Prometido). Para una persona que ame la justicia y espiritualmente receptiva, esta profecía es una gran prueba que confirma la veracidad del Mesías Prometido (as). El 20 de febrero tendrá lugar en tres días. Hoy, presentaré en este sermón algunos extractos en las palabras del propio Hazrat Musleh-e-Maud (ra). A través de ellas podremos comprender como esta persona cumplió con esta profecía y como fue bendecida por Ruhe Haq (espíritu de la verdad)

En 1914 Dios el Todopoderoso otorgó a Hazrat Musleh-e-Maud (ra) el manto del Jalifato. Todas las características del Reformador Prometido eran evidentes en su persona. Incluso entonces muchos miembros y estudiosos de la Comunidad Ahmadía creían que él era el Reformador Prometido. Sin embargo, Hazrat Musleh-e-Maud (ra) nunca lo anunció hasta el año 1944. En otras palabras, pasaron 30 años desde el comienzo de su jalifato. Entonces él anunció, en base a una visión que él era el Musleh Maud (Reformador Prometido). Hazrat Musleh-e-Maud (ra) dijo que, debido a su naturaleza, era una gran carga para él hacer dicho anuncio y mencionar todos los aspectos de su visión. De hecho, dijo en algunos lugares que su personalidad era tal que le resultaba muy embarazoso mencionar sus visiones y sus revelaciones. Sin embargo, en ocasiones, las circunstancias obligan a uno a revelar ciertos detalles. En cualquier caso, incluso antes de esto, estudiosos y miembros de la Yama’at (Ahmadía) instaban a Hazrat Musleh-e-Maud (ra) a anunciar que él era el Reformador Prometido, pero él les respondía que no era necesario anunciarlo. Dijo que si él era el Reformador Prometido y la profecía se estaba cumpliendo en su persona, entonces bien, pero que no era necesario anunciarlo. Respondiendo a algunas personas en una ocasión (que le instaba a realizar una proclamación), Hazrat Musleh-e-Maud (ra) dijo:

“En la lista de los anteriores Muyadidin (Reformadores) de entre los musulmanes que fue publicada después de que el Mesías Prometido (as) la viera, ¿cuántos de entre ellos hiceron el anuncio (que eran Reformadores)? He oído directamente del Mesías Prometido (as) que Aurangzeb (Emperador Mogol) podría haber sido un Muyaddid (Reformador) de su época, pero ¿acaso lo anunció? Umar bin Abdul Aziz es reconocido como un Muyaddid (Reformador) pero ¿acaso reclamó serlo? Por tanto, no es necesario para alguien no designado por Dios hacer una proclamación. La proclamación únicamente es necesaria para los designados por Dios según las profecías. Para alguien (Reformador) no designado por Dios solo necesitamos mirar el trabajo que ha realizado. Si observamos que su labor está siendo realizada, ¿entonces qué necesidad hay de una proclamación? Incluso si dicha persona constantemente niega (que es un Reformador) seguiríamos atribuyéndole dichas profecías. Incluso si Umar bin Abdul Aziz negase que fue un Muyaddid (Reformador) seguiríamos considerándole como uno de su época, porque para ser un Reformador uno no necesita anunciarlo. Solo los Reformadores designados necesitan proclamar que lo son si han sido designados. Si un individuo no designado ayuda durante su vida a revivir el islam y defenderlo de ataques de sus oponentes, lo llamaríamos un Muyaddid (Reformador), independientemente de si es consciente de ser uno o no. Solo un Mujaddid (Reformador) designado por Dios puede realizar una proclamación, como fue el caso del Mesías Prometido (as). [Hazrat Musleh-e-Maud (ra) continúa diciendo] Por tanto, no necesito anunciar ser el Reformador Prometido, ni necesitáis sentiros perturbados por lo que dicen los enemigos. No hay nada difamatorio por ello porque el verdadero honor es otorgado por Dios el Todopoderoso, incluso si todo el mundo te considera un desgraciado. Si uno sigue el camino de Dios el Todopoderoso, ciertamente será visto como honorable en Su corte. Aquel que emplea la falsedad y el engaño para demostrar que su proclamación errónea es verdadera, y debido a su empeño y a sus maquinaciones consigue prevalecer sobre la gente, sin embargo, nunca ganará el respeto en la corte de Dios. Aquel que recibe un gran respeto de forma aparente, pero carece de honor en la corte de Dios, en realidad no ha conseguido nada, sólo ha cosechado pérdidas y finalmente será humillado. (Hazrat Musleh-e-Maud (ra) continúa diciendo). Por tanto, sed siempre sinceros tanto en temas materiales como en espirituales. Quién cosecha pérdidas en el camino de Dios es quién realmente sale beneficiado.”

Por tanto, Hazrat Musleh-e-Maud (ra) ha destacado un punto fundamental aquí. La veracidad de aquel que es considerado como verdadero por Dios el Todopoderoso se manifiesta finalmente por el propio testimonio de Dios. No es necesario un anuncio en este aspecto. Por supuesto, si Al-lah el Todopoderoso decide que es necesario anunciarlo, entonces eso será lo que ocurra. En resumen, la forma de determinar si uno está llevando a cabo el trabajo de la religión acorde a la Voluntad de Dios, o si proviene de Dios, es analizando el apoyo que recibe de Dios.

Sin embargo, como he mencionado, cuando Al-lah el Todopoderoso le ordenó anunciar esto, entonces hizo una proclamación y dijo:

“Ahora Dios el Todopoderoso lo ha hecho evidente para mí y por ello anuncio que soy aquel en quién se cumple la profecía de Musleh Maud (Reformador Prometido).”

Por un lado, los miembros de la Yama’at (Comunidad Ahmadía) estaban felices después de realizarse este anuncio y, por otro lado, los Ghair Mubaieen (aquellos que rechazaron tomar el Bai’at del Jalifa) comenzaron a oponerse. El día 27 del Yalsah (Reunión Anual) de 1945, el segundo día del Yalsah Hazrat Musleh-e-Maud (ra) trató este tema y en particular teniendo en consideración a Maulvi Muhammad Ali Sahib, y dijo:

“Desde que anuncié que soy el Musleh Maud (Reformador Prometido), Maulvi Muhammad Ali Sahib ha comenzado una oposición innecesaria al respecto, en una dirección similar a la de Maulvi Sanaullah Sahib en el pasado. Cuando relato sueños y revelaciones y hago una proclamación basada en la declaración de Dios, Maulvi Muhammad Ali Sahib fracasa en presentar algún sueño o revelación de lo contrario, ni podrá hacerlo. Tan solo hace hincapié en presentar una sola revelación de hace treinta años, la cual también demostraba ser incorrecta si nos basamos en los hechos. Por lo tanto, si no ha existido revelación alguna, ¿cómo puede presentar alguna revelación? Lo único que le queda es mostrar oposición sin más. ¿Cómo puede refutarme si no presenta alegaciones? Los oponentes de Hazrat Ibrahim (Abraham), Hazrat Musa (Moises) y Hazrat Isa (Jesús) (la paz sea con ellos) no podían negar la existencia de la revelación porque creían que los profetas anteriores tuvieron revelaciones. Por lo tanto, no podían negar el hecho de estos profetas habían recibido revelaciones.

Con el fin de validar su afirmación y desafiar a los profetas solían decir que sus propias revelaciones eran fruto de su imaginación. De igual forma, los enemigos del Santo Profeta (sa) le acusaron de inventarse todas sus revelaciones. Si esta afirmación de cristianos y judíos es correcta y las revelaciones otorgadas al Santo Profeta fueron creadas por él mismo (Dios nos perdone) entonces, el honor de Dios el Todopoderoso asegura que habrían recibido revelaciones para invalidar al Santo Profeta (sa), que quedaría expuesto como un mentiroso, y el tema quedaría resuelto. En cambio, el mero hecho de que no se les concedió ningún tipo de revelación sirve como testimonio de que el Santo Profeta (sa) era veraz y sus oponentes, es decir, los judíos y cristianos, falsos. De una manera similar, hoy Maulvi Muhammad Ali sahib afirma que las revelaciones que se me concedieron son falsas. ¿Por qué Dios el Todopoderoso no le ofrece revelaciones verdaderas en mi contra para todo el mundo vea que Maulvi Sahib está diciendo la verdad y que mis afirmaciones son falsas?”

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) continúa diciendo:

“Es asombroso que un individuo pase día y noche dirigiendo a la creación de Dios por el mal camino y dedicando todos sus días y noches engañando y traicionando a la gente y, sin embargo, el honor de Dios el Todopoderoso no se vea perturbado. Si Dios no muestra celo por Su honor, la única razón subyacente es que, ciertamente, Dios el Todopoderoso es consciente de que Maulvi Sahib está muy lejos de Su cercanía. Por esta razón Dios el Todopoderoso no le ha concedido ninguna revelación. Desde el comienzo, la incredulidad siempre se ha opuesto a la verdad. Esto ha sido así desde el principio y continuará pasando, es decir, los enemigos siempre se oponen a la verdad.”

En consecuencia, aquellas personas que se oponen a [la verdad] siempre harán alegaciones, pero nunca presentarán nada en contra de ella para contradecirla, ni podrán hacerlo, por mucho que llamen a Dios como su testigo diciendo: “Llamamos a Dios como testigo de que nuestras revelaciones, sueños y visiones son verdaderos” porque son totalmente conscientes de que Dios el Todopoderoso les castigará por ello.

Ahora voy a presentar algunas revelaciones y visiones de Su Santidad, Hazrat Musleh-e-Maud (ra), que mencionó cuando anunció que él era el Musleh Maud [Reformador Prometido].

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) afirma:

“La primera señal que apunta a este rango [de Musleh Maud] es una revelación que recibí, durante la vida del Mesías Prometido (as). Cuando informé al Mesías Prometido (as) de esto, él lo escribió en el diario donde anotaba sus revelaciones. He contado esta revelación en varias ocasiones…”

(Su santidad, Hazrat Musleh-e-Maud (ra) está explicándolo a la congregación).

“Al principio pensé que solo estaba relacionado con el Jalifato, pero ahora mi mente apunta a que contenía una indicación de la posición que Dios el Todopoderoso iba a concederme en breve. La revelación es la siguiente:

[Árabe]

‘En verdad, Dios el Todopoderoso hará que tus seguidores sean victoriosos sobre aquellos que te han rechazado, hasta el Día del Juicio’”.

Su Santidad, Hazrat Musleh-e-Maud (ra) indica:

“Esta [revelación] contiene una sutil indicación que apunta hacia una profecía que se tenía que completar en un orden especifico; esa revelación es la que se le concedió al Mesías de Nazareth (as) [Jesús], que también se menciona en el Sagrado Corán. Sin embargo, las palabras que se usan en el Corán son:

[Árabe]

‘Y pondrá a aquellos que te siguen por encima de los incrédulos hasta el Día del Juicio.’

Pero las palabras de esta profecía son:

‘En verdad, Dios el Todopoderoso hará que tus seguidores sean victoriosos sobre aquellos que te han rechazado, hasta el Día del Juicio’. La razón de esto es que Jesús (as) reclamó ser el último profeta de la dispensación mosaica. En relación a las proclamaciones de esta naturaleza es necesario que la gente se oponga al principio, pero luego, tras un periodo de tiempo significante empiezan a aceptar al profeta. Sin embargo, ya que Dios el Todopoderoso deseaba hacer al individuo que iba a convertirse en la manifestación de la profecía del Musleh Maud (Reformador Prometido) primero como un Jalifa, y un Jalifa hereda al instante una comunidad establecida, por ello la cláusula ‘y pondrá a aquellos que te siguen” no era necesaria aquí.

Cuando un profeta presenta su proclamación ante la gente, como Jesús (as) hizo en su tiempo, inmediatamente le llaman falso. Que exista alguien del calibre de Hazrat Abu Bakr(ra) que acepte la proclamación es otro asunto diferente; exceptuándolo, lo normal es que, cuando un profeta anuncia su proclamación de profetazgo, el mundo entero le tacha de mentiroso. Al principio solo 3 personas aceptaron la proclamación del Santo Profeta (sa). Sin embargo, desde el comienzo, el Jalifa es aceptado por la comunidad entera. Por ello, al afirmar:

[Árabe]

Dios el Todopoderoso indicó que pronto le concedería [a Hazrat Musleh-e-Maud (ra)] una comunidad establecida. Después Dios el Todopoderoso haría crecer la relación entre él y su comunidad al punto de que un día su comunidad se subordinará a él. Algunos se opondrían a él, pero Dios el Todopoderoso permitirá a aquellos que guarden lealtad prevalecer sobre aquellos que le rechazaron hasta el Día del Juicio. Este dominio comenzaría tan pronto como tomará el puesto de Imam [líder]. La cláusula ‘y pondré a los que te sigan’ no es necesaria ya que no es necesario esperar a que la gente acepte el mensaje; ni es necesario esperar a que la gente empiece con su oposición, o a conjurar edictos, así como a burlarse de él y tratar de humillarle, planifiquen como borrar y destruirle; o para que la gente viaje ampliamente desde un extremo de la tierra hasta el otro para reunir una tormenta de oposición contra él. Al contrario, Dios el Todopoderoso se asegurará de confiar a la mayoría de la comunidad establecida por el Mesías Prometido (as) [es decir, a Hazrat Musleh Maud (ra)]. El día en que esta comunidad le sea otorgada, señalará el comienzo de la victoria de los que creyeron en ti sobre los que se te opusieron.”

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) continúa diciendo:

“¡Observad pues! Lo mismo se ha cumplido. La comunidad de Jesús (as) obtuvo la victoria después de trescientos años. Sin embargo, tan pronto como Dios el Todopoderoso me nombró Jalifa, en cuestión de unas pocas semanas, en relación a personas que se sublevaron contra mí y rechazaron mi nombramiento para ocupar este cargo -es decir, los peghami [aquellos que se negaron a jurar lealtad a manos de Hazrat Jalifatul Masih II (ra)]- Dios el Todopoderoso me concedió a mí y a mis seguidores la supremacía sobre ellos. A medida que pasan los días, por la Gracia de Al-lah el Todopoderoso, este predominio continúa creciendo.

Hoy los Peghami [aquellos que se negaron a jurar lealtad a manos de Hazrat Jalifatul Masih II (ra)] afirman que todo estaba basado en un solo sueño”,

es decir, esa visión, en base a la cual Hazrat Jalifatul Masih II (ra) anunció que él era el Musleh Maud (Reformador Prometido), y que se basó en esto para hacer su proclamación de ser el Musleh Maud.

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) declara:

“Aunque esto no fue un sueño, porque contiene palabras; la revelación previamente mencionada fue, de hecho, una revelación, y tuve esta revelación hace cuarenta años. Dios el Todopoderoso me informó que me convertiría en el Imam de una comunidad, de la cual algunos se opondrían a mí, pero la mayoría se uniría a mí. En cuanto a aquellos que permanecen unidos al Jilafat, Dios el Todopoderoso les concederá el dominio sobre los demás hasta el Día del Juicio. Al decir que ‘Dios el Todopoderoso concederá a tus seguidores el dominio sobre los que te rechazan’ sirve como indicación de que un día, Dios el Todopoderoso me concederá el título de profeta, refiriéndose a que seré una mera sombra o reflejo del profetazgo de Jesús (as) y del Mesías Muhammadi [el Mesías Prometido (as)]. La razón de esto es que la comunidad de un Jalifa está vinculada con él sólo en su periodo de vida. Después de la muerte continúan asociados con el profeta o aquellos que son reflejos de ellos. De manera similar, la palabra  [Árabe]  ‘no creen’ indica que después de Jalifato, recibiría otro estatus, que sería reflejo de la manifestación espiritual de ciertos profetas anteriores.”

Hazrat Musleh Maud (ra) declara:

“El segundo (signo) fue un Kashf [una visión] que experimenté durante la vida del Mesías Prometido (as) y que también alude a este rango (de un Reformador Prometido). Vi que salía de la habitación en la que habitaba el Mesías Prometido (as) y salí al patio donde también estaba presente el Mesías Prometido (as). En ese momento, una persona vino y me entregó un paquete y dijo, ‘algo de esto es para ti y algo de esto es para el Mesías Prometido (as).’ Estando en el estado de Kashf, miré el nombre en el paquete y tenía dos nombres escritos en él, Muhiy-ul-deen [quien da vida a la fe] y Muin-ul-deen (quien ayuda en la fe).”

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) continúa diciendo:

“En el estado de Kashf [visión], se me hizo entender que uno de los nombres era del Mesías Prometido (as) y el otro nombre era el mío. Ya que en aquella época yo sólo era un niño y no había oído hablar del nombre de Hazrat Muhiy-ul-deen Ibn-e-Arabi y sólo conocía a Aurangzeb [emperador de Mughal], cuyo nombre también era Muhiy-ul-deen asumí, por tanto, que yo era Muhiy-ul-deen. Y, puesto que Hazrat Muin-ul-deen Chishti era un santo bien conocido que había vivido en la India asumí, por tanto, que Muin-ul-deen se refería al Mesías Prometido (as). Sin embargo, después supe que Hazrat Muhiy-ul-deen Ibn-e-Arabi era un santo muy renombrado y por ello pensé que, como el Mesías Prometido (as) vino para el renacimiento del islam, él es Muhiy-ul- Deen y soy el Muin-ul-deen que vino a ayudar a la causa del islam. Por lo tanto, quién revivificó al islam fue el Mesías Prometido (as) y quién ayudó y apoyó a la fe soy yo, al igual que una madre que da a luz a un niño y la enfermera lo alimenta con leche”. 

Hablando del tercero (signo), Hazrat Musleh-e-Maud (ra) declara:

“Recibí la tercera revelación de una manera similar, pero la recibí después del fallecimiento del Mesías Prometido(as). La revelación fue: ‘¡Oh progenie de Daud! Adheriros a los mandamientos de Al-lah el Todopoderoso siendo agradecidos con Él’. Al decir: «Adheriros», Al-lah, el Todopoderoso me ordenó en esta revelación actuar completamente de acuerdo con su divina voluntad, y al decir: «progenie de Daud», Al-lah el Todopoderoso me comparó con Hazrat Suleman (as). Hazrat Suleman (as) se convirtió en el Jalifa después de Hazrat Daud (as) y también era su hijo.”

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) continúa diciendo:

“Recuerdo que esta revelación me fue revelada con tanta intensidad que durante un largo período de tiempo seguía sumido en el mismo estado que cuando recibí esta revelación. Esta revelación fue tan clara que, aunque el Mesías Prometido(as) había fallecido, cuando relaté esta revelación a algunos de mis amigos durante una caminata, me olvidé por completo de su muerte y sentí un súbito impulso de correr hacia el Mesías Prometido(as) y de informarle de esta revelación.”

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) dice entonces:

“El cuarto signo que atestigua la visión que Al-lah el Todopoderoso me mostró, en el cual yo era el Musleh-e-Maud (Reformador Prometido) es un Kashf [una visión]. Vi que estaba sentado orando en el Bait-ul-Dua del Mesías Prometido (as) (pequeña sala en la que el Mesías Prometido (as) solía rezar) cuando de repente vi que el Mesías Prometido (as) era Abraham. También recibí la revelación de que muchos Abrahams han aparecido en esta Ummah [seguidores del Santo Profeta (sa)]. En cuanto a Hazrat Jalifatul Masih I (ra), supe que también era Abraham y me dijeron que su nombre es Abraham Adham.  Adham era un rey, que abandonó su soberanía y siguió una vida de Tassawuf [misticismo]. Por ello, Dios me dijo que Hazrat Jalifatul Masih I (ra) era Abraham y que yo también era Abraham.” 

Hazrat Musleh Maud (ra) declara, en relación al quinto signo:

“El quinto signo que Al-lah el Todopoderoso me ha revelado tuvo lugar cuando se acercaba el momento del fallecimiento del Mesías Prometido. Vi en un sueño que sonaba una campana y el sonido que producía era como si golpearan una copa de latón contra algo. Sin embargo, el sonido que resonaba de esta campana era tan melodiosa y bella que sentía como si los sonidos maravillosos de toda la música del mundo estuvieran contenidos en este sonido. El sonido era cada vez más alto hasta que se transformó en un marco (el sonido se extendía por el ambiente hasta los cielos y luego se convirtió en un marco) como el marco de una foto. Luego vi aparecer la imagen de una persona muy bella y atractiva dentro del marco. La imagen comenzó a moverse y poco después alguien salió del marco y se puso frente a mí, y me pareció que se trataba de un ángel de Dios. El ángel dijo, ‘¡Ven! Te daré una charla/discurso sobre Surah Al-Fatihah’. Entonces, comenzó a darme una clase sobre Surah Al-Fatihah y continuó haciéndolo hasta que llegó al versículo Iyaaka Na’budu Wa Iyaaka Nast’aieen [sólo a Ti adoramos y solo a Ti imploramos ayuda], entonces dijo, ‘hasta ahora todos los comentaristas del Sagrado Corán solo han realizado sus comentarios hasta las palabras, Maliki Yaum-e-Deen [Dueño del Día del Juicio]. Sin embargo, te enseñaré el comentario del resto.’ Entonces, me enseñó el comentario completo del Surah Al-Fatihah. Cuando desperté, todavía podía recordar parte de lo que el ángel me había enseñado en mi sueño, pero no lo escribí, y más tarde también se me olvidó. Por la mañana le relaté el sueño a Hazrat Jalifatul Masih I(ra) y también le dije que cuando me desperté del sueño, todavía recordaba parte de lo que el ángel me había enseñado, pero por la mañana me había olvidado por completo todo aquello que me había enseñado. Al escuchar esto Hazrat Jalifatul Masih I (ra) dijo en un tono disgustado que había desperdiciado una gran cantidad de conocimiento y que debía haberlo anotado.”

Hazrat Musleh Maud (ra) a continuación declara:

“Sin embargo, desde ese día, Al-lah el Todopoderoso me continúa enseñando nuevas ideas de Surah Al-Fatihah. De hecho, desde que tuve esta visión, incluso ahora cuando estaba reflexionando sobre cómo diseñar un proyecto para ayudar en la reforma de la Yama’at [Ahmadía] y establecer la superioridad del Nizam [organización] islámico, Al-lah el Todopoderoso me ha enseñado un proyecto basado en Surah Al-Fatihah que, si se implementa, permitirá que el islam tenga tanto éxito que, los oponentes que sean testigos de ello, quedarán sorprendidos y no les quedará más opción que aceptar la superioridad de las tradiciones y costumbres islámicas. Además, los errores que han cometido los musulmanes después de la época del Santo Profeta (sa) al intentar comprender el Nizam islámico y las distintas órdenes relacionadas con sus tradiciones y costumbres también quedarán rectificados por la Gracia de Al-lah a través de este proyecto (estos errores fueron cometidos por los musulmanes después de la época del Santo Profeta (sa)). Todo esto me lo enseñó Dios el Todopoderoso del Surah Al-Fatihah y el verdadero significado de este sueño es que Al-lah el Todopoderoso ha llenado mis facultades intrínsecas con la comprensión del Sagrado Corán en general y, en particular, con el conocimiento del Surah Al-Fatihah, cuya revelación recibiré cada cierto tiempo, según las necesidades que surjan.”

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) también afirma:

“Cuando la división interna se formó en la Comunidad Musulmana Ahmadía, Al-lah el Todopoderoso me reveló, ‘Ciertamente, los partiremos en trozos.’ Aquellos quienes dejaron la Comunidad en aquel tiempo solían proclamar que formaban parte del 95 por ciento de la Comunidad, pero ¿cuál es su estado actual? Según esta profecía, Al-lah el Todopoderoso ciertamente les hizo pedazos. Antes de su muerte, Khawaja Kamal-u-Din Sahib escribió, ‘la revelación que Mirza Mahmud (es decir, Hazrat Musleh-e-Maud) publicó con respecto a nosotros se ha cumplido con detalle y en realidad nos hemos roto en pedazos.”

Hazrat Musleh-e-Maud (ra) declara:

“En breve, Al-lah el Todopoderoso me ha revelado el conocimiento de lo oculto en innumerables ocasiones y, de esta manera se cumple la profecía que dice que Al-lah el Todopoderoso concederá al Reformador Prometido el Espíritu de la Verdad. Estos son los signos que Al-lah el Todopoderoso ha manifestado a través de mí.”

Esto es lo que declaró Hazrat Musleh-e-Maud (ra). En cualquier caso, los detalles de la actual profecía son extensos y, en los próximos días, se llevarán a cabo varios Yalsas (reuniones/eventos) para conmemorar el cumplimiento de esta profecía y también diversos programas se retransmitirán a este respeto a través de la MTA. Los miembros de la Comunidad deben hacer el máximo esfuerzo para asistir y escuchar estos programas con el fin de desarrollar una comprensión más profunda de esta profecía. Hay incontables signos mencionados en esta profecía y Hazrat Musleh Maud (ra) ha identificado en ocasiones 50, 55 y hasta 60 cualidades y signos que se han mencionado en esta profecía y todos estos se han cumplido en la persona de Hazrat Musleh Maud (ra) con gran esplendor.

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