Hace poco tiempo, visité el museo de Yad Vashem en Jerusalén. Mientras recorría las diversas exhibiciones, me quedé con una pregunta dando vueltas en mi cabeza: ¿por qué la sociedad alemana no reaccionó de manera rotunda en los propios inicios de la propaganda antisemita, por ejemplo, tras la publicación del libro Mein Kampf? Un pensamiento