Jalsa Salana Alemania 2025 concluye con un discurso inspirador – Oficina de Prensa y Medios

El Yalsa Salana Alemania 2025 concluye con un discurso inspirador

Más de 46.000 personas de todo el mundo asisten a una convención religiosa de tres días en Mendig.

El 31 de agosto de 2025, el Jalifa V del Mesías, Hazrat Mirza Masrur Ahmad, concluyó la 49ª Convención Anual (Yalsa Salana) de la Comunidad Musulmana Ahmadía de Alemania con un discurso inspirador.

Su Santidad presidió la sesión de clausura virtualmente desde el Salón Masrur en Islamabad, Tilford, mientras más de 46.000 personas se congregaban en el recinto de la Yalsa en Mendig, Alemania.

Su Santidad pronunció un discurso conmovedor durante la sesión de clausura, en el que destacó la veracidad del Mesías Prometido (la paz sea con él) ante el inmenso progreso de la Comunidad Musulmana Ahmadía a pesar de las adversidades.

Al comenzar su discurso, Hazrat Mirza Masrur Ahmad dijo:

“Hoy, los esfuerzos de los musulmanes áhmadis de todo el mundo para cumplir su juramento de lealtad al Mesías Prometido (la paz sea con él), sacrificando sus vidas, riquezas y tiempo para la propagación del mensaje del islam, son una prueba clara de que Hazrat Mirza Ghulam Ahmad de Qadian (la paz sea con él) es, sin duda, aquel a quien Dios Altísimo envió en esta era para el resurgimiento del islam. Sin el apoyo y el socorro de Dios, no habría sido posible que personas de todos los rincones del mundo se unieran a su comunidad. Este es un favor especial de Dios, porque Él mismo prometió que cuando la gente comenzara a olvidar las enseñanzas del islam, llegaría un día en que Dios suscitaría a un hombre que, con la ayuda de Dios, transmitiría el mensaje del islam hasta los confines de la tierra”.

Su Santidad habló del momento de la llegada del Mesías Prometido (la paz sea con él), cuando el islam necesitaba urgentemente el cumplimiento de las promesas de Dios para los últimos días, como predijo el Santo Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones sean con él).

Hazrat Mirza Masrur Ahmad dijo:

“Cuando llegó el Mesías Prometido (la paz sea con él), toda persona que albergaba un profundo interés por el islam oraba para que Dios Altísimo enviara a alguien que rescatara el barco del islam, que se hundía, del remolino en el que se encontraba, para que sus enseñanzas pudieran prevalecer de nuevo y su hermoso y radiante mensaje se manifestara al mundo”.

Hazrat Mirza Masrur Ahmad continuó diciendo:

“Si analizamos la historia, encontramos que nadie se preocupó más por esto que Hazrat Mirza Ghulam Ahmad de Qadian (la paz sea con él), quien también participó en esfuerzos prácticos por esta causa. Sentía una profunda preocupación, como si un fuego ardiera en su interior, por cómo podría esforzarse por difundir el hermoso mensaje de Dios y las nobles enseñanzas del Santo Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones sean con él) al mundo. Anhelaba informar a la humanidad y proclamar que hoy, si existe alguna religión que pueda acercarnos a Dios y otorgarnos el verdadero conocimiento de Él, es solo el islam”.

Su Santidad dijo que el Mesías Prometido (la paz sea con él) escribió el libro Barahin-e-Ahmadía en una época en la que el islam se enfrentaba a feroces críticas y ataques, y muchos musulmanes estaban abandonando la fe. Los eruditos elogiaron el libro como una obra inigualable en defensa del islam. Esto reflejaba su profundo amor por el islam y el Santo Profeta (la paz y las bendiciones sean con él), y su deseo de demostrar que solo el islam es la religión verdadera y completa revelada por Dios.

Su Santidad afirmó que el resurgimiento del islam lo traería el Mesías Prometido (la paz sea con él).

Hazrat Mirza Masrur Ahmad dijo:

“A través del Mesías Prometido (la paz sea con él), se puso en marcha el verdadero renacimiento espiritual, pues de lo contrario, el mundo estaba destinado a la muerte espiritual. Hoy en día, vemos que la gente está tan inmersa en el materialismo que la espiritualidad prácticamente ha desaparecido y la religión es objeto de burla. En estos tiempos, es deber de todo musulmán ahmadí que ha hecho el juramento de lealtad cumplirlo con el máximo esfuerzo. Nuestras acciones deben reflejar obediencia a Dios y a sus enseñanzas. Debemos esforzarnos por elevar nuestros estándares de adoración para que se conviertan en un medio para alcanzar Su complacencia. Solo entonces nos beneficiaremos verdaderamente de las bendiciones del juramento de lealtad hecho por el Mesías Prometido (la paz sea con él) y participaremos de las bendiciones divinas destinadas a través de nuestra conexión con él”.

Hazrat Mirza Masrur Ahmad declaró, además:

“El Mesías Prometido (la paz sea con él) proclamó claramente que había sido divinamente designado y llamó a la gente a jurarle lealtad. Esta fue una afirmación que superó la capacidad humana, pues ningún falso pretendiente en la historia vivió una larga vida ni vio florecer a su comunidad. Por la gracia de Dios, la Comunidad Musulmana Ahmadía continúa progresando, estando ahora establecida en más de 215 países y naciones del mundo. Este crecimiento se debe únicamente al apoyo y socorro especiales de Dios. En cambio, los falsos pretendientes fueron capturados y destruidos por Dios, e incluso aquellos que se opusieron al Mesías Prometido (la paz sea con él) fueron finalmente reducidos a la nada”. Hablando de la comunidad devota que se le concedió al Mesías Prometido (la paz sea con él), Hazrat Mirza Masrur Ahmad dijo:

“Dios concedió una comunidad y proveyó a un grupo de personas sinceras que no solo hicieron sacrificios, sino que también establecieron altos estándares y ofrecieron sus vidas como ofrenda. Y esto continúa hasta el día de hoy. Lo hacen únicamente para priorizar la religión sobre los asuntos mundanos. Cuando ofrecieron el sacrificio de sus vidas, fue para cumplir la misión del Mesías Prometido (la paz sea con él). Permanecieron firmes en su fe con la promesa que hicieron, comprometiéndose a defenderla y a priorizar siempre su religión sobre el mundo”.

Hazrat Mirza Masrur Ahmad añadió:

“En el mundo, observamos que dondequiera que los musulmanes ahmadíes se enfrentan al martirio, por la gracia de Dios, esto resulta en una mejor difusión de la Comunidad Musulmana Ahmadía, y la Comunidad se extiende aún más. De igual manera, otra señal de las comunidades divinas es que cuentan con ayudantes dispuestos a hacer sacrificios económicos. Por lo tanto, observen que hoy, sobre la faz de la tierra, solo los seguidores del Verdadero Siervo del Santo Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones sean con él) cuya Comunidad continúa haciendo tales sacrificios”.

Su Santidad también afirmó que los opositores de la Comunidad Musulmana Ahmadía exponen su falsedad mediante la violencia y la injusticia, mientras que la Comunidad Musulmana Ahmadía continúa difundiendo el verdadero mensaje del islam por todo el mundo. A pesar de la oposición, por la gracia de Dios, la Comunidad crece cada año, con cientos de miles de personas uniéndose a ella anualmente.

Recordando a los musulmanes ahmadíes sus responsabilidades, Hazrat Mirza Masrur Ahmad dijo:

“Vosotros que habéis tenido la fortuna de aceptar al Mesías Prometido (la paz sea con él) en esta época, tenéis el deber de transmitir este mensaje al mundo: que el Mesías y Mahdi que estaba por venir ya ha aparecido. Transmitidlo especialmente a los musulmanes, siempre que sea posible. Y en lugares donde no se permite la predicación abierta, al menos la gente puede orar para que Dios abra los corazones de la gente y les conceda la capacidad de aceptar al Mesías Prometido”.

Hazrat Mirza Masrur Ahmad afirmó, además:

“Hoy en día, el mundo musulmán se enfrenta a un estado de impotencia. A pesar de la riqueza y los recursos, muchas naciones musulmanas están tan absortas en las ocupaciones mundanas que siguen siendo vulnerables a las reiteradas injusticias de otros, sin nadie que las defienda verdaderamente. Incluso cuando se habla de guerra o yihad, no hay fuerza que respalde tales afirmaciones. La Comunidad Musulmana Ahmadía no cree en la violencia. En cambio, afirmamos que el verdadero camino hacia adelante es a través de la oración y las acciones rectas, que son las únicas que pueden transmitir el hermoso mensaje del islam. Si nuestras acciones son virtuosas y buscan complacer a Dios, Él mismo creará los medios para las victorias del islam y el ahmadíat. Por lo tanto, oramos por todos los musulmanes oprimidos, para que Dios los alivie de toda dificultad, y recordamos a los creyentes que nuestra principal preocupación debe ser cómo complacer a Dios”.

Hazrat Mirza Masrur Ahmad concluyó su discurso diciendo:

“Como dijo el Mesías Prometido (la paz sea con él), nuestras armas para la victoria son nuestras oraciones. Debemos prestar gran atención a las oraciones, pues solo cuando nos volvamos sinceramente hacia ellas, Dios nos concederá el éxito. De igual manera, nos enseñó a esforzarnos por adquirir conocimiento religioso, a cumplir con los derechos de Dios y a establecer la regularidad en las oraciones diarias. Si nos esforzamos en todos estos aspectos, Dios nos hará herederos de Sus bendiciones. Que Dios nos permita a todos cumplir con estos deberes y ser testigos del continuo progreso de la Comunidad Musulmana Ahmadía durante nuestras vidas”.