- مَاۤ اَفَآءَ اللّٰہُ عَلٰی رَسُوۡلِہٖ مِنۡ اَہۡلِ الۡقُرٰی فَلِلّٰہِ وَ لِلرَّسُوۡلِ وَ لِذِی الۡقُرۡبٰی وَ الۡیَتٰمٰی وَ الۡمَسٰکِیۡنِ وَ ابۡنِ السَّبِیۡلِ ۙ کَیۡ لَا یَکُوۡنَ دُوۡلَۃًۢ بَیۡنَ الۡاَغۡنِیَآءِ مِنۡکُمۡ ؕ وَ مَاۤ اٰتٰٮکُمُ الرَّسُوۡلُ فَخُذُوۡہُ ٭ وَ مَا نَہٰٮکُمۡ عَنۡہُ فَانۡتَہُوۡا ۚ وَ اتَّقُوا اللّٰہَ ؕ اِنَّ اللّٰہَ شَدِیۡدُ الۡعِقَابِ ۘ﴿۸﴾59 : 8 Cuanto Al-lah ha entregado a Su Mensajero como botín de la gente de las ciudades es para Al-lah y para el Mensajero y para los parientes cercanos y los huérfanos, los necesitados y viajeros, para que no circule únicamente entre aquellos de vosotros que sois ricos. Y cuanto os da el Mensajero, tomadlo, y cuanto os prohíba, absteneos de ello. Temed a Al-lah; pues en verdad Al-lah es Severo en la retribución.