- ثُمَّ قَفَّیۡنَا عَلٰۤی اٰثَارِہِمۡ بِرُسُلِنَا وَ قَفَّیۡنَا بِعِیۡسَی ابۡنِ مَرۡیَمَ وَ اٰتَیۡنٰہُ الۡاِنۡجِیۡلَ ۬ۙ وَ جَعَلۡنَا فِیۡ قُلُوۡبِ الَّذِیۡنَ اتَّبَعُوۡہُ رَاۡفَۃً وَّ رَحۡمَۃً ؕ وَ رَہۡبَانِیَّۃَ ۣ ابۡتَدَعُوۡہَا مَا کَتَبۡنٰہَا عَلَیۡہِمۡ اِلَّا ابۡتِغَآءَ رِضۡوَانِ اللّٰہِ فَمَا رَعَوۡہَا حَقَّ رِعَایَتِہَا ۚ فَاٰتَیۡنَا الَّذِیۡنَ اٰمَنُوۡا مِنۡہُمۡ اَجۡرَہُمۡ ۚ وَ کَثِیۡرٌ مِّنۡہُمۡ فٰسِقُوۡنَ ﴿۲۸﴾57 : 28 Entonces hicimos que Nuestros Mensajeros siguieran sus pasos; e hicimos que Jesús, hijo de María, los siguiera, entregándole el Evangelio. Y pusimos en los corazones de los que lo aceptaron, compasión y misericordia. Pero la vida monástica que innovaron no es lo que les prescribimos, sino que lo hicieron para buscar el favor de Al-lah; pero no la practicaron de acuerdo con su verdadero espíritu. Y sin embargo a quienes creyeron de entre ellos, les otorgamos su debida recompensa, aunque muchos de ellos son rebeldes.