- قُلۡ اَرَءَیۡتُمۡ شُرَکَآءَکُمُ الَّذِیۡنَ تَدۡعُوۡنَ مِنۡ دُوۡنِ اللّٰہِ ؕ اَرُوۡنِیۡ مَاذَا خَلَقُوۡا مِنَ الۡاَرۡضِ اَمۡ لَہُمۡ شِرۡکٌ فِی السَّمٰوٰتِ ۚ اَمۡ اٰتَیۡنٰہُمۡ کِتٰبًا فَہُمۡ عَلٰی بَیِّنَتٍ مِّنۡہُ ۚ بَلۡ اِنۡ یَّعِدُ الظّٰلِمُوۡنَ بَعۡضُہُمۡ بَعۡضًا اِلَّا غُرُوۡرًا ﴿۴۱﴾35 : 41 Diles: “¿Habéis visto a vuestros dioses partícipes a quienes invocáis en lugar de Al‑lah? Mostradme pues lo que han creado de la tierra. ¿Tienen acaso una participación en la creación de los cielos? O ¿les hemos dado un Libro para que tengan una prueba de ello?”. No, los inicuos no se prometen mutuamente más que el engaño.