- فَتَقَبَّلَہَا رَبُّہَا بِقَبُوۡلٍ حَسَنٍ وَّ اَنۡۢبَتَہَا نَبَاتًا حَسَنًا ۙ وَّ کَفَّلَہَا زَکَرِیَّا ۚؕ کُلَّمَا دَخَلَ عَلَیۡہَا زَکَرِیَّا الۡمِحۡرَابَ ۙ وَجَدَ عِنۡدَہَا رِزۡقًا ۚ قَالَ یٰمَرۡیَمُ اَنّٰی لَکِ ہٰذَا ؕ قَالَتۡ ہُوَ مِنۡ عِنۡدِ اللّٰہِ ؕ اِنَّ اللّٰہَ یَرۡزُقُ مَنۡ یَّشَآءُ بِغَیۡرِ حِسَابٍ ﴿۳۸﴾3 : 38 Y su Señor la aceptó con benevolencia y la hizo crecer con hermoso crecimiento, y convirtió a Zacarías en su tutor. Cada vez que Zacarías la visitaba en su habitación, la encontraba con provisiones. Dijo: “¡Oh, María! ¿De dónde viene todo esto?”. Ella respondió: “Procede de Al-lah.” En verdad, Al-lah da sin medida a quien Le place.