- لَیۡسَ عَلَیۡکَ ہُدٰٮہُمۡ وَ لٰکِنَّ اللّٰہَ یَہۡدِیۡ مَنۡ یَّشَآءُ ؕ وَ مَا تُنۡفِقُوۡا مِنۡ خَیۡرٍ فَلِاَنۡفُسِکُمۡ ؕ وَ مَا تُنۡفِقُوۡنَ اِلَّا ابۡتِغَآءَ وَجۡہِ اللّٰہِ ؕ وَ مَا تُنۡفِقُوۡا مِنۡ خَیۡرٍ یُّوَفَّ اِلَیۡکُمۡ وَ اَنۡتُمۡ لَا تُظۡلَمُوۡنَ ﴿۲۷۳﴾2 : 273 No es responsabilidad tuya hacer que sigan el camino recto; pero Al-lah guía a quien Le place. Y cualquier riqueza que empleéis es para vosotros mismos; mientras gastéis, únicamente, para conseguir la gracia de Al-lah. Y cualquier riqueza que empleéis se os devolverá íntegra y no sufriréis perjuicio alguno.