- وَ قَالَ الَّذِیۡنَ اَشۡرَکُوۡا لَوۡ شَآءَ اللّٰہُ مَا عَبَدۡنَا مِنۡ دُوۡنِہٖ مِنۡ شَیۡءٍ نَّحۡنُ وَ لَاۤ اٰبَآؤُنَا وَ لَا حَرَّمۡنَا مِنۡ دُوۡنِہٖ مِنۡ شَیۡءٍ ؕ کَذٰلِکَ فَعَلَ الَّذِیۡنَ مِنۡ قَبۡلِہِمۡ ۚ فَہَلۡ عَلَی الرُّسُلِ اِلَّا الۡبَلٰغُ الۡمُبِیۡنُ ﴿۳۶﴾16 : 36 Quienes elevan partícipes iguales a Dios dicen: “Si Al-lah lo hubiese querido, no habríamos adorado a nada en vez de a Él, ni nosotros ni nuestros padres, ni habríamos prohibido nada sin una orden Suya”. Lo mismo dijeron quienes los precedieron. Pero ¿son responsables los Mensajeros de algo salvo de la simple entrega del Mensaje?